Ayuda a que se conozca esta historia y que no se quede aislado.
Durante su Presidencia de Luxemburgo, el actual presidente de la Comisión Europea organizó en Europa un cártel internacional de evasores fiscales para que las empresas más grandes del mundo tributaran a menos de un ridículo 1%, gracias a acuerdos secretos y a la colaboración de las grandes auditoras. Una de estas auditoras es PWC, del actual ministro de Guindos, tal y como revelamos hace unas semanas desde Xnet a través del Buzón de Xnet.
Hemos descubierto los detalles de esta historia, conocida como «Luxemburgo leaks», gracias a una investigación en la que han participado 80 periodistas de 26 países durante 6 meses (entre los cuales estaba el medio español El Confidencial).
Ante el escándalo internacional que ha supuesto la pérdida de legitimidad para el actual presidente de la Comisión Europea, él y sus acólitos han optado por atrincherarse en el poder y no dar ningún tipo de explicación. Cuando antes de ayer se ha anunciado por fin algún tipo de investigación oficial sobre lo sucedido, hemos descubierto estupefactos cual es el nivel de impunidad del que cree gozar esta mafia internacional de grandes evasores fiscales. El primer y único investigado por el momento es es el trabajador de PWC que denunció los crímenes. Sin el grupo de personas que han denunciado los crímenes del entramado de Juncker, de entre los cuales este es el único nombre que ha trascendido, nunca hubiéramos conocido la magnitud y los detalles de este saqueo.
Esta persona es Antoine Deltour, un joven auditor cuyo nombre viene a unirse al de Manning, Assange, Snowden, Falciani… en una ya larga lista de filtradores cuya acción y compromiso está inclinando la balanza contra el poder y en favor de la gente. Desde Xnet, partiendo de nuestra experiencia con filtraciones y de nuestro trabajo con Buzón de Xnet estamos estos días trabajando en la protección de Antoine Deltour y la divulgación de su historia, ya que la función de nuestra plataforma internacional PILA es federar competencias entre las redes de filtradores a nivel internacional.
En estos momentos la protección de Antoine Deltour y su seguridad no depende del anonimato sino de todo lo contrario, del apoyo público. Por eso decidió hablar en esta 1ª y única entrevista al diario Liberatión.
Por eso hemos traducido el comunicado de petición de ayuda que ha difundido esta mañana su comité de ayuda y os pedimos a todos que dediquéis un minuto a visitar la web del comité de apoyo a Antoine Deltour y que mostréis allí vuetro apoyo con todos los que ya lo estamos haciendo, miembros de PILA como:
La asociación Xnet y los colaboradores de su Buzón de filtracioens, 15MpaRato y Partido X; Hervé Falciani, Stephanie Gibaud, William Bourdon, Gerard Ryle, Edwy Plenel…
Compartimos a continuación la traducción del comunicado de petición de ayuda que ha difundido esta mañana su comité de ayuda:
Ha asumido haber copiado cientos de «tax rulings», acuerdos fiscales cerrados por el fisco luxemburgués a favor de multinacionales. Cientos de millones de euros se evaporan de los países donde estas firmas dirigen sus actividades reales, así, sumas colosales son tranferidas a jurisdicciones con muy pocas tasas, la mayoría de las veces Luxemburgo. La escala industrial del sistema de planificación fiscal agresiva que sale a la luz con esta filtración era hasta ahora desconocida. Estos mecanismos no habían sido jamás descritos con tanta precisión.
Las repercusiones de sus revelaciones son inmensas. Llevando el asunto de los «tax rulings» hasta instancias internacionales (como el G20 o la Comisión Europea) se ha conseguido favorecer avances políticos que poco a poco conducen a una mejora de la justicia fiscal.
Antoine Deltour ha actuado sin segundas intenciones y de manera totalmente desinteresada. Jamás ha buscado sacar beneficio de sus informaciones. Solamente desea favorecer el debate público sobre las práctica éticamente condenables. Este acto cívico se inscribe dentro de un amplio movimiento formado por numerosos ciudadanos, pqueños emprendedores, filtradores, periodistas, ongs o instituciones internacionales, determinados todos a actuar contra la opacidad de la economía «offshore» y por el avance de la justicia fiscal.